Una de las paradas más importantes de la visita guiada gratuita será Kofukuji, un hermoso templo budista que alberga un par de icónicas pagodas de tres pisos. Otro lugar de visita obligada en Nagasaki es Dejima, una isla artificial que en su día sirvió de alojamiento a los comerciantes holandeses durante el periodo de aislamiento de Japón, entre 1641 y 1868. Sus calles empedradas aún conservan gran parte de su estado original, lo que permite a los visitantes hacerse una idea de cómo era la vida en aquellos tiempos. Después de que tu guía te explique un poco la relación de Japón con el extranjero, estarás listo para pasar al Barrio Chino, una vibrante zona llena de restaurantes chinos y vendedores ambulantes de artículos tradicionales, como farolillos o figuritas de la suerte. El barrio de Tojin Yashiki captará sin duda tu atención: antaño hogar de familias samuráis durante el Periodo Edo de Japón. Aquí puedes encontrar residencias multifamiliares de dos pisos que se construyeron hace cientos de años y que aún hoy se mantienen en pie, ¡para que te hagas una idea de cómo vivía la gente entonces!