A medida que avanza el tour, te sumergirás en la Pontevedra medieval, donde los ecos de víctimas de la peste y almas condenadas aún parecen recorrer sus laberínticas callejuelas. Uno de los lugares más peculiares de la ciudad es la famosa estatua del loro Ravachol, un monumento en honor a un ave que se convirtió en un símbolo del espíritu pontevedrés. Más adelante, la inquietante historia de las monjas que se emparedaron voluntariamente te pondrá los pelos de punta. Los magníficos monumentos góticos de la ciudad no solo son maravillas arquitectónicas, sino que también esconden símbolos crípticos y mensajes ocultos del pasado. Mientras exploras, descubrirás relatos de espíritus errantes, rituales olvidados y la inquietante presencia de la Santa Compaña, la legendaria procesión espectral que recorre los caminos gallegos al caer la noche.