En este recorrido, los visitantes verán la famosa Fuente de Neptuno, ubicada en la bulliciosa Plaza del Municipio, un importante punto de referencia en Nápoles desde el siglo XVI. Luego, el viaje continúa con un paseo en el funicular de Nápoles, un medio de transporte tradicional que se utiliza para recorrer las empinadas colinas que rodean la ciudad. En la cima, te esperan impresionantes vistas del Golfo de Nápoles y el Mediterráneo. También verás puntos de interés como el imponente Castillo del Huevo, construido a orillas del mar en el siglo XII, y el Castillo de San Elmo, una fortaleza medieval encaramada en una colina. En los días despejados, se puede ver la icónica silueta del Monte Vesubio dominando el horizonte. Estos sitios son perfectos para capturar la esencia de Nápoles con tu cámara, ya que combinan la belleza natural con la grandeza histórica.