Cuando tu viaje comience cerca de la Estación Central, te sumergirás de lleno en el ajetreo y el bullicio de Istedgade, una de las calles más dinámicas de la ciudad. Cada atracción que te encuentres en el camino, desde el emblemático Edificio Axel, hasta la Gliptoteca y el Diamante Negro, será como pasar las páginas de un cautivador diario arquitectónico de Copenhague. Cada parada es una visión de la transformación de Vesterbro, un distrito que ha resurgido como un ave fénix, abrazando un nuevo capítulo tras la Segunda Guerra Mundial. Te sentirás como en una cápsula del tiempo, haciendo revivir el pasado.